19 marzo 2010

DE NANAS Y SOLDADOS (Homenaje a Miguel Hernández en su centenario)

De pastor empezaste en la cañada
con tus rimas cual "silbo vulnerado"
ignorando el final que te esperaba,
que un hombre, sólo sabe del pasado.

Aprendiste de nanas y soldados,
de hambre, de locura y Poesía
y andabas con tus versos al costado,
lejos, en la trinchera, muda y fría.

Un amor te esperaba y a tu hijo
acunabas dolor en los papeles
y ese amor y esa madre, en su cobijo,
la cebolla trocaba en cascabeles.

Te esperábamos todos mas no pudo
el destino fatal torcer su espada,
te quedaste, Miguel, y España anduvo
con su camisa yerma, desgajada.

No te inquietes, soldado, tu palabra
queda escrita en las venas de la historia
y poetas que somos, nuestra entrañaa
te ha esculpido por siempre en la memoria.

No hay comentarios: