31 diciembre 2010

EL AÑO VIEJO SE VA

Ya se va muriendo el año
mientras Diciembre se enfría
y encenderemos la vía
como lo hicieran antaño.
Según subimos peldaño
la vida se nos acorta
mas, parece no le importa
al mundo que brinda y bebe
como si fuera un percebe
¿por qué el hombre así se porta?

El hombre busca placer,
celebra salida de año
y nos lleva al desengaño
el ver otro amanecer.
¿Cómo no lagrimacer
ver un año que declina,
otro que empieza y empina
la cuesta entera de nuevo?,
para no tomar placebo
subimos adrenalina.

Año que muere y que nace,
año que se queda corto
para quien hizo el aborto
de no terminar “en pace”.
Al mundo se le deshace
en los dedos tanto afán,
con papel de celofán
quiere guardar sus tesoros;
si no tuvieron decoros
volarán cual gavilán.

31-12-2010

28 diciembre 2010

EL AMOR TODO LO PUEDE

EL AMOR TODO LO PUEDE

Nunca tuve gran temor
sino a lo desconocido
que con Amor he nacido
y moriré con Amor.
Aunque a veces el horror
pueda herirme muy adentro
sin embargo siempre encuentro
algo que pueda salvarme
si bien, puede manejarme
y buscar el epicentro.

Gracias a Dios que mi fuerza
se encuentra en lo espiritual,
allí, nadie me hace mal
ni mi camisa se esfuerza.
Como el fruto de la nuerza
aguanto con los pesares,
la vida, sus avatares
porque el Amor brillará
siempre en mis ojos que ya
volvieron desde otros mares.

Monte Abantos los acoge
en toda su Majestad
y aumenta la calidad
que su resplandor recoge.
Y para que no se enoje
saludo todos los días
muy de mañanita y frías
dando gracias porque “estoy”
y si algún día me voy
no tenga melomanías.

La luz interior que ves
es la que hay que buscar
pero después de pasar
el túnel que va al revés.
De lo sombrío al envés
es lo que cualquier hermano
debería de hacer, sano
su “viaje hacia la luz”
así, vería al trasluz
lo esencial del ser humano.


La busqué hace muchos años
y al final yo la encontré
arriba, abajo, luché
para bajar los peldaños
Y con todos mis reaños
pude hacer ese gran viaje
bien ligera de equipaje
con deseos de salir
a flote y poder partir
ya con el nuevo pasaje.

Tal descubrimiento fue
más de lo que yo esperaba,
ansias de Amor, yo buscaba
lo que al final, encontré.
Al Dios divino llamé
estaba en el mismo abismo
que quizá por estrabismo
no lo viera en mí presente,
allá en la acera de enfrente,
abajo-arriba-en ti mismo.

20 diciembre 2010

ATARDECE EN EL VALLE

La tarde se desprende de los robles,
sentimos la frescura
del sol que ya desnudo se amohina.
Los pasos nos envuelven soñolientos
mientras en el camino
se encienden las luciérnagas que, ahora
hermanas luz,
nos velan como lámparas dispersas en la anoche.

Tengo el silencio entre las manos.
La carne me cabalga despaciosa
y voy sintiendo frío entre los hombros.
Un deseo de ti, suavemente me crece
y va llenando el hueco que se didlata dentro.
Eres
proyecto de jardín prendido en la memoria,
agua manando a ciegas,
laberinto
donde mis ojos pierden la inocencia.
Tu recuerdo me va quemando el centro
y la noche se acerca presurosa.
Tiendo mis dedos para tocar tu eclipse.
Me turbo. Te me escapas...
Y de nuevo estoy sola
refrescando mis ansias con la brisa.

11 diciembre 2010

MUJER DE AGUA

Mujer de agua, hoy llegas
y paseas las calles y los rostros,
las ansias, los calores del asalto.
Mi puerta está entornada
por ver si me regales tu perfume
y me llenas de un aire plateado
--relámpago de almendras--.
Te acercas como un río,
anegas todo sueño.
Hay besanas y lagos transparentes,
corazones que aguardan
la música engastada de tus perlas.
No es fácil verte así
derramada,
cayendo desde el arco de la noche,
eterna encubridora.
Pero hoy nos visitas
mujer de agua y, pura
y yo salgo a beberte
y me pongo mí túnica de estrellas.

03 diciembre 2010

NIEVA

Cae la nieve, dulce, serenamente
cae
más allá del cristal donde me absuelvo.
En esta vieja aldea ya casi abandonada
donde todo es pureza,
donde oreaban niños cuando crecían las endrinas.

Hoy nieva porque es tarde
-la nieve llega tarde y cuando no se la espera-
que el invierno fue cálido y piadoso
como tus manos, como mi asombro en ellas.
Vuelvo a la nieve, el blanco es mi refugio,
la nieve, sal sobre mi herida,
flores de almendro posadas en las estanterías
(de mi ventana
ésta por donde miro,
miro y admiro como caen las estrellas diminutas,
esa rama vencida por la luz.

Y seguirá nevando en esta noche blanca
tal el imsomnio que presiento.
El sueño es como un don sobre los copos.

De qué sirve el imsomnio
de qué sirve esta nieve para nadie
si nunca pasa nada,
si la nieve es tan muda que nunca nos inquieta
y mañana, desenfadadamente, nos habrá abandonado.